Actualmente vivimos una coyuntura atípica nunca antes vista, nuestras familias están siendo afectadas en todo aspecto (económica, social, cultural, emocional, etc.) siendo la parte emocional la más frágil de quebrarse.
Los padres de familia a menudo me comentan que ya no saben que hacer porque sus hijos vienen presentando muchos cambios a nivel emocional y conductual, los encuentran más engreídos, poco tolerantes, muestran cambios de ánimo repentino, quieren hacer lo que desean, invierten más tiempo en la tv, Tablet, etc. Todo esto produce una carga emocional muy fuerte en los padres de familia, generando stress y conflictos dentro de su hogar.
Los adultos somos el principal y único soporte socio emocional del niño, así como los responsables de ayudarlos a modular sus emociones, sobre todo destructivas, sin embargo, para que esto resulte, el adulto debe primero aprender a regular sus propias emociones de tal manera que pueda mantener su equilibrio emocional y un control de sus reacciones. Entendamos primero que ocurre en nuestro cerebro cuando una persona se encuentra en estado de estrés: automáticamente el cerebro comienza a liberar la hormona cortisol, la cual aparece para poner en alerta al organismo activándolo para lo que pueda venir. Estos niveles de cortisol elevado ocasionan en nuestro cuerpo un estado de lucha o pelea interna, donde todos los sistemas indispensables para la supervivencia, dejan de funcionar como deberían. Por lo tanto, se recomienda bajar estos niveles de cortisol, para que se regulen y disminuyan generando nuevamente armonía en la persona. Como adultos tenemos el control y poder de autorregularnos y liberar nuestro estrés, esto sucede cada vez que tenemos una experiencia positiva, nos sentimos alegres, felices, etc. disminuyendo nuestros niveles de cortisol. Sin embargo los niños no tienen ese poder por ellos mismos por lo que dependerán siempre del soporte de un adulto, el niño es un ser extremadamente perceptivo de las emociones de sus progenitores por lo tanto si usted quiere ayudar a su niño a calmarse y estar en armonía debe dar el ejemplo.
“En aprender a manejar las propias emociones – no reprimirlas- reside la clave de éxito de los futuros adultos”.
Eduard Punset 2012
Sheilla Anton Chang
Especialista en Neuroeducación Infantil
Promotora y Fundadora del Centro de Estimulación Mis 7 Sentidos
https://www.facebook.com/mis7sentidos
